lunes, 24 de mayo de 2010
Más críticas a PowerPoint ¿PowerPoint es el "diablo"?
En algunas aulas se pasó, en muy poco tiempo, de los carteles de papel o las diapositivas y el retro-proyector a las posibilidades interactivas de la computadora con cañón.
El cuestionamiento que la tecnología propone a nuestras infraestructuras pone en jaque nuestros valores más firmes.
Creo que lo importante, lo que debemos fomentar desde estos ámbitos comunitarios, es la capacidad de detectar y revertir las malas influencias, las prácticas nocivas, anti-funcionales surgidas de este contexto de innovación permanente. Aunque a veces no sea tan fácil y requiera análisis profundos, preparación especial y una actitud que parece ir contra la corriente.
A continuación proponemos un ejemplo de esta actitud a imitar. Una brillante observación sobre un recurso que supuestamente mejora las posibilidades cognitivas y que a veces las limita. “PowerPoint es el diablo” es un (ya clásico) artículo que Edward Tufte publicó en Wired. Allí propone una severa crítica sobre el uso irreflexivo de las posibilidades de este recurso:
• La presentación típica pone el formato por encima del contenido facilitando la apariencia de interés para algo que puede estar perfectamente hueco.
• Cada transparencia muestra usualmente unas 40 palabras, 8 segundos de lectura, lo que hace que hagan falta muchas de ellas para completar un razonamiento. Ello implica dificultades en apreciar el contexto y valorar las relaciones entre unos aspectos y otros, que pueden estar separados varias transparencias entre si.
• El punto clave de una presentación es el contenido. “Si tus números son aburridos es que has escogido los números equivocados”. Si el contenido no tiene interés o está mal estructurado, animarlo o ponerlo en colores no lo va a arreglar.
• Otro aspecto habitual en las presentaciones es la falta de interactividad con la audiencia. Los ponentes a menudo lanzamos un mensaje complejo que es difícil de asimilar en el poco tiempo disponible, que la audiencia no puede rebatir o comentar.
Por Christian Silva
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Creo que el PowerPoint no debería ser “el diablo”, principalmente si ante todo, en el armado de una presentación, prevalece el sentido común. Opino que se debería tener en cuenta el tipo de público a quien va dirigida la presentación.
ResponderEliminarLas presentaciones que más impactan son las simples, breves, concisas y donde el contenido está bien elegido. Aunque creo también que es importante el carisma de quien lo presenta y la pasión y conocimiento que demuestra por el tema. Coincido que hay que hacer participar al auditorio e incluso tener trucos para generar participación cuando el grupo está cohibido. Para esto sirve llevar preguntas, armar foros espontáneos y hacer dinámicas.
Qué interesante este artículo!Me parece muy bueno el poder plantearse una mirada más crítica sobre este" bombardeo tecnológico" que quizá sentimos.Como dice un dicho popular.."algo no tan bueno debe tener no.."Creo que ,en la medida en que estemos ATENTOS al cómo ,el por qué,el para qué y el con quién usamos la herramienta tecnológica,no debería haber ningún inconveniente.Me parece que el gran desafío está en construir una mirada crítica...y mientras estemos atentos a no realizar "prácticas anti funcionales"(como dice el artículo)el power point puede favorecer los procesos de aprendizajes.Su uso requiere de nuevos registros de la información y eso es muy enriquecedor!!
ResponderEliminarMuy bueno el artículo!!!! creo que siempre es necesario parar un poco la "bola" y sentarnos a reflexionar sobre la/las herramientas que utilizamos para la enseñanza... no porque usemos la tecnología, el aprendizaje se va a dar.¿Quién nos lo garantiza? Considero que hay un pensamiento erroneo sobre este tema y creo importante, como docente, desmitificar esto y ser más críticos a la hora de utilizar una herramienta tecnológica para lograr ciertos aprendizajes.
ResponderEliminarNo considero que la herramienta pueda ser acusada de "diablo".
ResponderEliminarLo importante es saber utilizarlo, según los objetivos.
Son variadas las ventejas de PowerPoint: es llamativo, puede contener dievrsidad de imágenes, textos, etc. Posee un gran poder sintetizador.
En caso de que su uso sea abusado o perjudicial, deberíamos culpar al usuario, autor o docente correspondiente.